Dentro de los relojes tipo “herramienta” con un diseño atractivo, y una calidad fuera de toda duda, no puedo dejar pasar la ocasión de examinar el Citizen Promaster Pilot. Este reloj no solo tiene una apariencia de “aviador” sino que además lo es; enfocado a los pilotos, estamos ante un reloj lleno de funcionalidades; que han sido combinadas de una forma exquisita para dar lugar a un diseño espectacular y llamativo.
La presentación es sobria y elegante, sin estridencias y bien compartimentada. Este modelo además viene acompañado de un amplificador que viene por separado en su propio embalaje; igual de sobrio y elegante, sin florituras.
Una vez abiertas las cajas, nos encontramos el reloj, acompañado de su manual de instrucciones, tarjeta de garantía; y en el caso del amplificador, exactamente igual. Veámoslo de cerca:
Se nota contundente en la mano, pero no pesado; a simple vista se nota que es una pieza muy bien acabada; y con bastantes detalles.
Si, el dial es bastante sobrecargado, pero parte de su encanto reside precisamente en eso. Incorpora en su bisel giratorio interno reglas de medida de combustible, en formato internacional e imperial. Ya en el dial en la parte más cercana a dicho bisel encontramos reglas de medida de velocidades en ambos formatos; si seguimos mirando de fuera adentro, encontramos reglas de cálculo horario, marcadores de estatus del propio funcionamiento del reloj, subesferas con selección de funciones, crono/calendario perpetuo y franja horaria del día.
Correa de cuero de muy buena calidad, cristal plano, aro superior tallado, caja cepillada, corona tallada y firmada, corona del bisel giratorio tallada; y cierre deployante firmado en acero.
En cuanto a sus dimensiones, estamos con una pieza con un diámetro de caja de 44mm sin corona; que llega hasta los 48 con ellas; un grosor de 19mm y una distancia entre asas de 23mm.
En cuanto a sus tripas; estamos ante un cuarzo solar que equipa el calibre E670 eco-drive de Citizen; contando entre sus funciones con recepción de radio, sincronización automática, indicadores de estado, cronógrafo, tres selectores horarios, calendario perpetuo, franja horaria, fecha y alarma. Estamos ante uno de los calibres multifunción más veteranos del fabricante nipón; disponible desde hace ya más de 8 años en varios modelos de la marca dentro de la gama Promaster, como los eco-drive titanium.
Entre otras de sus características cuenta con cristal de zafiro, wr200m y una reserva de marcha de 6 meses sólo con 5 minutos de exposición a la luz solar; aunque hay que recordar que los calibres “solares” de Citizen, son capaces de cargar con cualquier fuente de luz.
Cerramos el apartado técnico con el lumen; que siempre es una característica que nos atrae bastante. En el caso de este reloj, siempre podríamos pedir más, pero honestamente el que incorpora es más que suficiente, a fin de cuentas, es legible, y con todas las “herramientas” que tiene reflejadas en su esfera no es que tenga sitio para mucho más; dura al menos 3 horas antes desaparecer del todo y tiene un color azulado muy agradable y llamativo.
Bajo mi punto de vista nos encontramos ante una pieza que une cuatro mundos en uno a la perfección y en armonía; la relojería, la tecnología, la aviación y la utilidad total como herramienta; obteniendo una pieza francamente atractiva y bonita; con unas características técnicas a nivel interno muy buenas; como a nivel de “reloj”, con detalles como el cristal de zafiro, el cierre firmado en acero, la excelente calidad de su correa y los acabados que tiene. Es francamente difícil encontrar algo de su nivel y características al precio en el que se sitúa, que ronda nuevo los 400€ en cualquier distribuidor español de la marca. En mi caso fue un reloj que desde que lo ví me enamoró. Si buscas algo tipo “herramienta”, que además lo sea, que sea bonito, diferente, y tenga calidad; sin duda este es tu reloj.